Esperar soluciones de un proceso de diálogo que no es tal, nos hace cómplices desde la comodidad de esperar por la acción de otros. Genera responsabilidad por omisión
El Secretario general de la Organización de Estados Americanos Luis Almagro lo dijo en marzo de 2017. En este punto llamó a implementar la Carta Democrática Interamericana y suspender a Venezuela del ente regional si el país no realiza elecciones generales de forma urgente.
No han dado resultado y los de dialogo fracasaron
Almagro dijo que los numerosos intentos diplomáticos «no han dado resultado y los de dialogo fracasaron». Mientras manifiesta su preocupación por el deterioro del país y la agudización de la situación económica en Venezuela.
El secretario insistía en que recuperar el orden y democracia del país sería a través de elecciones generales, la liberación de los presos políticos, la validación de las leyes que han sido anuladas, renovación del Poder Electoral y los magistrados de la Corte Suprema.
El Gobierno venezolano ha convertido su Constitución en papel mojado; la voz del pueblo venezolano ha sido silenciada y encarcelada
Asi mismo, condenó una «inacción» de la región y pidió al Consejo Permanente, que reúne a los 34 países miembro, «resultados concretos» para «restaurar la democracia» en Venezuela. El secretario señaló en aquel momento… «El Gobierno venezolano ha convertido su Constitución en papel mojado; la voz del pueblo venezolano ha sido silenciada y encarcelada».
El resultado de las votaciones el 5 de junio de 2018 fueron los siguientes:
A petición del canciller de Venezuela Jorge Arreaza se hizo la votación nominal, en la que antiguos aliados del Gobierno de Maduro, como Ecuador y Nicaragua, se abstuvieron. Solo votaron en contra “rotundamente no”, dijo Arreaza, Dominica, San Vicente y Las Granadinas, así como Bolivia, mientras que se abstuvieron la mayoría de los países del Caribe.
A favor votaron Argentina, Bahamas, Barbados, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Honduras, Jamaica, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Santa Lucía. También se abstuvieron El Salvador, San Kist y Nevis, Suriname, Trinidad y Tobago, Antigua y Barbuda, Belice, Grenada, Haití, Ecuador, Uruguay y Nicaragua.
Esta resolución, desconoce las elecciones presidenciales del pasado 20 de mayo en Venezuela y la legitimidad de Nicolás Maduro como mandatario reelecto. Hoy casi dos años después se cumplieron las predicciones de Almagro e irónicamente los que en aquel momento no hicieron lo que debían hacer para evitar la tragedia del éxodo venezolano de estos dos últimos años, los muertos innecesarios jóvenes, niños y ancianos y la destrucción del país. Hoy todos hacen lo que se debió hacer en aquel momento, hoy que ya lo destruido no se puede volver atrás y lo que se presagia es peor.
Nadie escucho ese anuncio que estaba más que cantado y que podía haber evitado tanto dolor y tragedia y la destrucción de un país hermoso que hoy solo sangra y se encuentra desperdigado por la región y otras partes del mundo, pero, ¿y los que no pudieron huir?
Hoy es hora de hacer memoria y que aquellos que callaron en aquel momento o no hicieron lo que debían hacer, sepan que son responsables del dolor de familias destruidas, muertes innecesarias y la destrucción de un país que fue abandonado por la comunidad internacional y la región que hoy quiere lavar sus manos llenas de sangre, con el apoyo incondicional, hoy que ya suena a tarde y mal. Luís Almagro no deliraba, simplemente intentaba evitar esta tragedia que ya es parte de la historia de la hipocresía de la diplomacia y la especulación interesada en especial capitalista, el petróleo es dinero, los Derechos Humanos molestan en la mesa de los políticos.
La pregunta es ¿De qué sirve la soberanía si el pueblo soberano padece de emergencia sanitaria, alimentaria y los que pudieron se tuvieron que ir, otros murieron por falta de medicinas o porque no hay o no pudieron pagarlas? La soberanía sin dignidad y derechos básicos asegurados pasa a ser opresión.